Después de la derrota de la derrota sufrida ante Holanda, los rostros de los jugadores de Brasil lo decían todo: tristeza, decepción. El capitán Thiago Silva, con lágrimas en los ojos pidió disculpas nuevamente a la afición.
“Tanta gente soñó con este momento, pasó noches sin dormir, y que acabara de esta forma, la gente no lo merecía. Hay que pedir disculpas otra vez al pueblo por el 7-1 y el 3-0,” manifestó el defensor central.
“Hoy nos abuchearon, que es una cosa normal, pero nosotros también tenemos sentimientos y fue una decepción muy grande,” añadió.
Por su parte, Oscar, uno de los mejores de la selección durante el Mundial se quedó sin palabras.
“Es un sentimiento horrible. Tenemos que hablar. Sufrimos una gran derrota contra Alemania,” indicó el jugador del Chelsea. “Hoy intentamos vencer, obtener el tercer lugar, pero no fue nuestro día. No podemos hablar más y habrá que ver que nos depara el futuro.”